miércoles, 14 de noviembre de 2012

Desde ahora será menos costoso comprar acciones de una compañía.

A partir de la entrada en vigor de la Ley 7/2012, de 29 de octubre, con la modificación de la Ley 24/1988, de 28 de julio, del Mercado de Valores, adquirir una participación mayoritaria en sociedades con inmuebles ya no será tan gravoso.
En las operaciones de transmisión de acciones o participaciones de una compañía, no se paga Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP) ni IVA. Antes de esta Ley, lo que ocurría, es que si en estas transmisiones se vendían inmuebles (cuya venta directa si hubiese supuesto pagar algunos de los impuestos descritos anteriormente), existía una norma que obligaba a pagarlos en las operaciones en las que:
  • Más del 50 por ciento del activo de las sociedades adquiridas estuviese compuesto por inmuebles situados en España.
  • El comprador, además, debía adquirir el control directo o indirecto de la compañía con esta transmisión de acciones o participaciones.

Para la Administración Tributaria, cumpliéndose estos dos requisitos, era de aplicación directa el pago, sin analizar realmente, si el adquiriente tenía la intención o no de eludir los impuestos. Gravando de forma indiscriminada a operaciones de compra de compañías con fines empresariales, o compras de imnuebles puras y duras.
Este reciente cambio legal pretende racionalizar esta situación y no gravar estas operaciones, de tal forma, que si los inmuebles de la sociedad, están afectos a actividades empresariales o profesionales, la transmisión estará exenta de IVA y de ITP. Para aquellos inmuebles no afectos, se seguirá de la misma manera anterior.
Lo que queda claro, es que si se pueden producir, ahora con esta nueva situación, compra de sociedades con fines meramente empresariales, en las que estas adquisiciones sean mucho menos gravosas, al desaparecer como un coste adicional los impuestos inherentes a ellas. Aspecto más que necesario con los tiempos que estamos viviendo, y que muchas empresas no podían cambiar de propietarios, debido a el alto coste que suponía para el comprador, hacerse cargo de estos impuestos.